CARTA AL CORREDOR.




Tu sudor es mi respeto, mi admiración, tus zancadas a oscuras, silenciosas,  forjadas en sueños, son también las mías. Correr es la máxima expresión de libertad del ser humano, tan sólo equiparable a la emociones hacia nuestros semejantes.

Cuando anudas tus cordones, en firme expresión de voluntad y coraje, cuando superas el dolor, el lógico deseo de la busqueda de comodidad, vences a todo prejuicio, eres mi referencia, mi ejemplo a seguir
.
Corre por esencia, vente en este día en el que no hay dorsal, no hay premio en meta, tan sólo eres tú, el desnivel, la férrea voluntad y la reivindicación de una forma de vida. No niegues el pagar un dorsal, no hagas del correr una forma de consumismo, ni tampoco una lucha anti sistema, en ese día, en el Monte de Boadilla, corre por ti, por que eres libre para hacerlo, correr nunca será un gesto, ni una obligación hacia nada, ni siquiera hacia uno mismo, es sólo una opción, una forma de vivir.